,

Postcovid: un panorama para la recaída en adicciones.

Por Laura Duarte – Coordinadora de Comunicaciones 

En el marco de la situación de emergencia que ha envuelto al mundo entero y ha obligado a establecer protocolos de bioseguridad, cierres totales de ciudades e incluso de países y particularmente el llamado aislamiento social, se busca poner sobre la mesa el asunto de la abstinencia forzosa a la que se han visto enfrentadas las personas con algún tipo de adicción.

Las personas que tienen un uso problemático de sustancias psicoactivas pueden enfrentar una crisis emocional y de salud mucho más severa, según la Dra. Diana Peña, Directora científica de la Fundación Libérate, en entrevista para El Tiempo.com “la incertidumbre genera mucha ansiedad y desafortunadamente la mayoría desconoce o no ha aprendido a tener salud mental y a desarrollar habilidades que permitan afrontar la realidad sin ninguna sustancia o estímulo externo que permita que se sienta bien consigo mismo y con los demás”.

Adicionalmente, según la Dra. Nora D. Volkow, M.D., psiquiatra e investigadora, directora del National Institute on Drug Abuse (NIDA, Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas), “El aislamiento puede afectar la neurobiología, reduciendo los receptores dopaminérgicos y haciéndonos más vulnerables a las adicciones”. Lo que implica que cualquier persona puede desarrollar una adicción durante o después del confinamiento ya que su estilo de vida forzosamente se ha visto obligado a cambiar, y el adaptarse a los cambios puede constituirse en un factor estresante.

¿Detener el consumo es suficiente?

La Doctora Martha Suescún, directora de la Fundación Libérate, institución que ha trabajado durante 18 años por una Colombia Libre de Adicciones y que en este momento coyuntural ha desplegado todo un sistema de atención acogiéndose a los lineamientos de bioseguridad recomendados por las autoridades, busca establecer una voz de alerta frente a la posibilidad de recaída:

“Si un usador de sustancias psicoactivas no ha tomado un tratamiento y no tiene las herramientas para manejar la ansiedad y manejar la abstinencia, la probabilidad de recaer es muy alta. Posiblemente el confinamiento se convirtió en la contención y las personas lograron parar el consumo de las sustancias; sin embargo, hay un asunto al que debe prestarse mayor atención ya que de este dependen muchos de los disparadores de consumo: la gestión emocional.

Si no hay manejo de los estados emocionales la persona puede volver a buscar la sustancia”, expresó la Dra. Suescún.

En torno a esta realidad la Fundación Libérate expresa con sentido de urgencia su preocupación frente a este panorama y establece un llamado de atención a la sociedad colombiana para que no se ignoren los factores de riesgo que se pueden desplegar en una situación de posconfinamiento.

¿Cómo pueden prevenir la recaída los usadores que han parado su consumo?

La Fundación Libérate cuenta con programas de atención tanto en la modalidad de internación en los que el paciente recibe atención psicosocial de manera integral basada en la evidencia científica.

Otra estrategia que ha desarrollado la Fundación Libérate, teniendo en cuenta la necesidad de respetar el distanciamiento social sin descuidar o dejar de brindar atención a sus pacientes, es la modalidad denominada Salas Virtuales, atención ‘on line’ basada en la evidencia con acompañamiento de un equipo interdisciplinario de profesionales de la Salud Mental expertos en adicciones.

Adicionalmente, contamos con programas de acompañamiento familiar en los cuales se busca brindar una asesoría a las familias de los pacientes con el fin de trabajar en ese entorno familiar el cual va a ser determinante en muchos casos para el buen desarrollo de la recuperación de los pacientes.