Los avances tecnológicos han impactado a todos los profesionales y sectores de la industria, así mismo cada área del desarrollo humano puede encontrar en la tecnología una forma de facilitar sus funciones. Para el campo de la psicología esto no es ajeno, existen aplicaciones que pueden apoyar el ejercicio tanto académico como profesional, destacamos algunas como:
Phobious : Permite intervenir trastornos fóbicos y TOC, simulando exposiciones progresivas por medio de estímulos visuales, aunque ha demostrado efectividad aún requiere de un seguimiento profesional para monitorizar los resultados y progreso del paciente.
DSM-V Criteria : Contiene el manual de Diagnóstico Estadístico de los Trastornos Mentales en la última versión con la especificación de cada uno de los trastornos, es de fácil uso y de gran ayuda en el momento de realizar diagnósticos diferenciales ya que contiene criterios específicos para cada entidad.
Mendeley : Para investigaciones es de gran utilidad, permite organizar información y sincronizarla, crea referencias, filtrar artículos por fecha, autor, temática, palabras clave, entre otros; facilita el trabajo documental para desarrollar trabajos e investigaciones.
PIR : Diseñada para estudiantes, permite ampliar conceptos relacionados con el área clínica, cuenta con test o evaluaciones con preguntas de múltiple respuesta que permiten evidenciar las respuestas correctas y escoger la temática a abordar, una buena herramienta académica.
Siente : Aplicación basada en la psicología positiva con prácticas de Mindfulness en la cual se pueden programar rutinas personalizadas en función de la percepción subjetiva de bienestar, a partir de una sencilla evaluación relacionada con la satisfacción frente a la vida.
En el mercado virtual se encuentran múltiples herramientas, sin embargo es importante tener en cuenta que en el ejercicio clínico una aplicación o un equipo inteligente no suple la interacción propia de la intervención en la cual la alianza terapéutica depende del rapport y empatía y esto no puede ser sustituido, por el contrario, el éxito de los procesos terapéuticos depende no solo de la empatía con el profesional sino de la simpatía del mismo, claramente respetando límites a fin de evitar transferencia y contratransferencia.
La tecnología ofrece gran utilidad pero no lo es todo, las aplicaciones sugeridas previamente son una muestra de cómo podemos facilitar nuestro trabajo y no una forma para evitar asumir el mismo con responsabilidad.